En japonés se emplea el término «KUBI» para referirse al cuello, las muñecas y los tobillos indistintamente, y aunque en shibari «kubi» generalmente se asocia con el cuello, en este taller os mostraremos qué tienen en común estas tres zonas del cuerpo y qué técnicas emplear en cada una para obtener resultados interesantes y gratificantes en el plano erótico.
Empezaremos por aclarar, que, «kubi shibari» no hace referencia a una serie de figuras o ataduras, sino a un conjunto de técnicas que se aplican sobre cuello, muñecas o tobillos. De paso, recordamos que esta formación pone el foco en el uso erótico de la técnica, y que ambas partes, quien ata y quien es atado, participan de forma activa en la práctica.
¿Asfixia erótica?
Sí, pero con seguridad. Reduciendo los riesgos al mínimo y aumentando las sensaciones al máximo. Ya que en ningún momento se trata de estrangular a la persona atada, sino de diferentes formas de explorar sus deseos mediante el uso de la técnica.
Muñecas y Tobillos al igual que el Cuello
La norma de seguridad fundamental a la hora de aplicar cuerdas sobre el cuerpo nos dice que debemos dejar libres de cuerdas las articulaciones. Especialmente aquellas que son tan delicadas como las muñecas o los tobillos. Por lo que en el taller veremos tanto conceptos anatómicos para comprender su funcionamiento, como técnicas que nos permitan utilizar estas áreas del cuerpo con seguridad.
¿Cuál es este uso?
Estudiamos cómo implicar todos los elementos disponibles en el entorno, y cualquier parte del cuerpo en la vivencia erótica por medio del shibari, buscando siempre la forma más eficiente y segura de hacerlo.
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